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Incontinencia Urinaria.

La incontinencia urinaria es la pérdida involuntaria de orina, es decir, la incapacidad para controlar la salida de la orina de la vejiga. Puede variar desde pequeñas fugas al toser o estornudar hasta pérdidas más abundantes que afectan la calidad de vida.


Síntomas comunes de la incontinencia urinaria:


  • Pérdidas involuntarias de orina al hacer esfuerzos como toser, reír, levantar peso o hacer ejercicio (incontinencia de esfuerzo).
  • Urgencia urinaria, que es una necesidad repentina e intensa de orinar, a veces seguida de pérdida de orina (incontinencia de urgencia).
  • Micción frecuente, necesidad de ir al baño muchas veces durante el día o la noche.
  • Goteo o escapes de orina sin control aparente.
  • Sensación de no vaciar completamente la vejiga.

 

CAUSAS DE LA INCONTINENCIA URINARIA


1. Causas musculares y del suelo pélvico

  • Debilidad de los músculos del suelo pélvico (por embarazo, parto o envejecimiento).
  • Daño del esfínter urinario (por cirugía, lesiones o partos complicados).
  • Prolapso de órganos pélvicos (vejiga, útero o recto que presionan la vejiga)


2. Causas neurológicas

  • Lesiones nerviosas (por partos, cirugía o radioterapia).
  • Enfermedades neurológicas como:
    • Esclerosis múltiple
    • Parkinson
    • Diabetes (neuropatía diabética)
    • Accidente cerebrovascular (ACV)
    • Lesión medular


3. Cambios hormonales

  • Menopausia: la falta de estrógenos debilita los tejidos del tracto urinario.
  • Embarazo y posparto: aumentan la presión sobre la vejiga y debilitan el suelo pélvico.


4. Causas funcionales o temporales

  • Infecciones urinarias (provocan urgencia y pérdidas).
  • Estreñimiento severo (presiona la vejiga).
  • Consumo de ciertos medicamentos: diuréticos, sedantes, relajantes musculares.
  • Ingesta excesiva de líquidos, cafeína o alcohol.


5. Causas anatómicas o estructurales

  • Cirugías previas (como histerectomía o prostatectomía).
  • Traumatismos en la zona pélvica.
  • Malformaciones congénitas (en niños o adultos jóvenes).


6. Envejecimiento

  • Disminución natural del tono muscular.
  • Alteración en la capacidad de la vejiga para retener orina.
  • Mayor sensibilidad a los medicamentos o infecciones.

 

Tipos principales de incontinencia urinaria:


  • Incontinencia de esfuerzo: ocurre con actividades que aumentan la presión intraabdominal (ej. toser, saltar).
  • Incontinencia de urgencia: relacionada con una necesidad urgente y fuerte de orinar.
  • Incontinencia mixta: combinación de los dos tipos anteriores.
  • Incontinencia por rebosamiento: cuando la vejiga no se vacía bien y se produce escape por sobrellenado.


¿En qué consiste la rehabilitación del suelo pélvico para la incontinencia urinaria?


Es un tratamiento fisioterapéutico dirigido a fortalecer y mejorar el control de los músculos del suelo pélvico, que son los que sostienen la vejiga y ayudan a controlar la salida de la orina. La idea es que, al fortalecerlos y hacerlos más coordinados, se reduzcan o eliminen las pérdidas de orina.



Beneficios:

  • Disminución o eliminación de pérdidas urinarias.
  • Mejora del control y la fuerza muscular.
  • Aumento de la calidad de vida y autoestima.
  • Prevención de complicaciones futuras.

Incontinencia Fecal.

La incontinencia fecal es la pérdida involuntaria de heces o gases, debido a una disfunción del control de los esfínteres anales, del recto o del suelo pélvico. Es un problema que puede afectar tanto a hombres como a mujeres y tiene un fuerte impacto emocional y social.


Síntomas de la incontinencia fecal


  • Pérdida involuntaria de heces líquidas o sólidas.
  • Escape de gases sin poder controlarlo.
  • Sensación de urgencia para defecar, sin poder llegar a tiempo al baño.
  • Sensación de vaciamiento incompleto o de tener que volver al baño poco después.
  • En casos más severos, no darse cuenta del escape hasta después de que haya ocurrido.


Factores y causas comunes


  • Debilidad o lesión de los músculos del esfínter anal (por cirugías, partos o envejecimiento).
  • Daño nervioso (por enfermedades como diabetes, lesiones de médula espinal, o esclerosis múltiple).
  • Prolapsos rectales o del suelo pélvico.
  • Cirugías anales o rectales previas.
  • Diarreas crónicas o estreñimiento severo.
  • Trauma obstétrico (desgarros durante el parto vaginal).


¿Se puede tratar?


Sí. El tratamiento depende de la causa, pero en muchos casos la fisioterapia del suelo pélvico es muy efectiva. Puede incluir:


  • Ejercicios de fortalecimiento del esfínter anal y del suelo pélvico.
  • Biofeedback para mejorar la conciencia y el control muscular.
  • Estimulación eléctrica para reactivar los músculos.
  • Reeducación del hábito intestinal y cambios en la dieta.

Vejiga Hiperactiva.

La vejiga hiperactiva es una alteración del funcionamiento de la vejiga que provoca contracciones involuntarias, incluso cuando la vejiga no está llena. Esto genera una necesidad urgente y frecuente de orinar, a veces con escapes de orina.


SINTOMAS


  • Urgencia urinaria: necesidad repentina y fuerte de orinar.
  • Aumento de la frecuencia urinaria: más de 8 veces al día.
  • Nicturia: levantarse varias veces por la noche para orinar.
  • Incontinencia urinaria de urgencia: pérdida involuntaria de orina asociada a la urgencia (en algunos casos).

Causas comunes


  • Factores neurológicos: lesiones de médula, Parkinson, esclerosis múltiple.
  • Infecciones urinarias frecuentes.
  • Obstrucciones urinarias crónicas.
  • Cambios hormonales (como la menopausia).
  • Daño o debilidad del suelo pélvico.
  • Estreñimiento crónico.
  • Consumo de cafeína, alcohol o bebidas carbonatadas.
  • Factores psicológicos o estrés.

Tratamiento desde la rehabilitación del suelo pélvico


La fisioterapia del suelo pélvico es una de las mejores opciones de tratamiento conservador, especialmente en casos leves o moderados.


Objetivos:


  • Reducir la frecuencia y urgencia urinaria.
  • Mejorar el control vesical.
  • Reeducar la función de la vejiga y del suelo pélvico.

La rehabilitación del suelo pélvico puede mejorar significativamente los síntomas de la vejiga hiperactiva, sin necesidad de medicación o cirugía, especialmente si se detecta y trata a tiempo.

Preparación al parto y post parto.

La rehabilitación del suelo pélvico en la preparación al parto es una parte fundamental del cuidado prenatal que busca fortalecer, flexibilizar y concientizar esta zona para favorecer un parto más seguro, activo y respetado, y reducir complicaciones posteriores como incontinencia o prolapsos.


OBJETIVOS de la rehabilitación del suelo pélvico en el embarazo:


  1. Mejorar la conciencia corporal y del periné
  2. Prevenir o reducir disfunciones como incontinencia urinaria
  3. Preparar el periné para que sea flexible y resistente durante el parto
  4. Favorecer una buena postura y biomecánica del cuerpo
  5. Facilitar un parto más fluido y con menos riesgo de desgarros o episiotomía
  6. Acelerar la recuperación postparto


TECNICAS Y HERRAMIENTAS USADAS EN LA PREPARACIÓN AL PARTO


🔹 1. Ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico (Kegel)

  • Se enseña a contraer y relajar correctamente el periné.
  • Ayuda a sostener el peso del útero y a prevenir pérdidas de orina.

🔹 2. Ejercicios de relajación y flexibilización perineal

  • Se busca que el periné pueda ceder sin dañarse durante el parto.
  • Incluye estiramientos suaves y técnicas de masaje.

🔹 3. Masaje perineal (a partir de la semana 32-34)

  • Mejora la elasticidad del tejido perineal.
  • Disminuye el riesgo de desgarros.
  • Puede realizarlo la madre o su pareja, con la guía de una fisioterapeuta.

🔹 4. Ejercicios de movilidad pélvica y postura

  • Favorecen el encajamiento del bebé y la apertura del canal de parto.
  • Se trabaja con pelotas de pilates, cuclillas asistidas, posiciones de liberación pélvica, etc.

🔹 5. Respiración y pujos dirigidos

  • Enseña a coordinar la respiración con el trabajo de parto y a pujar sin dañar el periné.
  • Se enfoca en pujos fisiológicos (espiratorios) y controlados.

🔹 6. Uso de dispositivos como Epi-no® o pelvitrainers (opcional)

  • Ayudan a entrenar la elasticidad del canal vaginal.
  • Se deben usar bajo supervisión profesional.


Cuándo empezar?


  • Idealmente desde el segundo trimestre del embarazo (semana 16-20), aunque el trabajo más específico sobre el periné se enfoca en el tercer trimestre.

La rehabilitación del suelo pélvico antes del parto no solo prepara físicamente para el nacimiento, sino que también empodera a la mujer, le da herramientas para el parto activo y favorece una mejor recuperación.

Disfunciones sexuales.

Son problemas en la función sexual que surgen por el mal estado de los músculos y tejidos del suelo pélvico: pueden estar hiperactivos (tensos) o hipoactivos (débiles), y eso afecta la sensibilidad, el placer y el control muscular durante las relaciones sexuales.

 

Causas comunes

  1. Tensión o espasmos en el suelo pélvico
  2. Debilidad muscular o hipotonía
  3. Parto vaginal o cesárea
  4. Cirugías pélvicas o ginecológicas
  5. Trauma físico o abuso sexual
  6. Problemas emocionales (estrés, ansiedad, depresión)
  7. Cambios hormonales (menopausia, embarazo, anticonceptivos)
  8. Dolor pélvico crónico


Síntomas frecuentes en mujeres:

  • Dolor durante las relaciones sexuales (dispareunia)
  • Imposibilidad de penetración (vaginismo)
  • Pérdida del deseo sexual
  • Dificultad para alcanzar el orgasmo
  • Sequedad vaginal


En hombres:

  • Dolor al eyacular o durante la erección
  • Disfunción eréctil
  • Eyaculación precoz o retardada
  • Sensación de debilidad en el pene

 

DISFUNCIONES SEXUALES MÁS FRECUENTES EN MUJERES


  1. Dispareunia
    • Dolor durante o después de las relaciones sexuales.
    • Puede deberse a tensiones del suelo pélvico, infecciones, sequedad vaginal o causas emocionales.
  2. Vaginismo
    • Contracción involuntaria de los músculos vaginales que impide la penetración.
    • Suele estar relacionado con ansiedad, trauma o hipertonía del suelo pélvico.
  3. Anorgasmia
    • Dificultad o incapacidad para alcanzar el orgasmo.
    • Puede deberse a causas físicas (poca sensibilidad, debilidad muscular) o psicológicas.
  4. Deseo sexual hipoactivo (falta de deseo)
    • Disminución del interés por el sexo.
    • Común en el postparto, menopausia, estrés crónico o problemas de pareja.
  5. Sequedad vaginal o falta de lubricación
    • Suele relacionarse con cambios hormonales (menopausia, anticonceptivos).
 
 

DISFUNCIONES SEXUALES MÁS FRECUENTES EN HOMBRES

  1. Disfunción eréctil
    • Dificultad para conseguir o mantener una erección.
    • Puede ser vascular, neurológica, emocional o por debilidad del suelo pélvico.
  2. Eyaculación precoz
    • Eyaculación que ocurre con mínima estimulación, antes de lo deseado.
    • Asociada a ansiedad, falta de control muscular o hipersensibilidad.
  3. Eyaculación retardada o aneyaculación
    • Dificultad o imposibilidad para eyacular.
    • Puede deberse a fármacos, alteraciones nerviosas o trauma emocional.
  4. Dolor pélvico postorgásmico o durante la eyaculación
    • A menudo relacionado con contracturas o tensión en el suelo pélvico.
  5. Disminución del deseo sexual
    • Relacionado con estrés, problemas hormonales, fatiga o depresión.

 

La fisioterapia especializada en suelo pélvico es uno de los abordajes más eficaces para tratar disfunciones sexuales cuando están relacionadas con este sistema.